Para nadie es un secreto que las baterías son uno de los aspectos más importantes en el sector de movilidad. Básicamente, cualquier vehículo de movilidad eléctrica tiene una dependencia total de una batería para su funcionamiento correcto. Es por ello que, el avance de los coches eléctricos se basa en el desarrollo e innovación de las baterías. Conoce la nueva normativa europea para la regulación del mercado de baterías eléctricas, una serie de reglas que cambiarán por completo el estilo, diseño y material de las baterías.
Compañías como Tesla, han logrado un avance en el uso de las baterías, desde diseños eficientes con diferentes materiales hasta una autonomía más duradera. Aunque, el parlamento europeo ha modificado las normas para mejorar algunos aspectos y de esta forma obtener un mejor uso del producto en la unión europea. Actualmente, las baterías con materiales de segunda son escasas y aquellas que están hechas a base de desechos solo tienen un pequeño porcentaje. Estas nuevas reglas impulsarán el uso de materiales reciclables y otros aspectos ambientales a tener en cuenta ¡Lee todo hasta el final!
Conoce todo sobre la nueva normativa europea
Basada en un ciclo de vida completo de una batería, las nuevas normas analizan desde el rendimiento, material, seguridad y sostenibilidad, hasta el reciclaje. Básicamente, la finalidad es reducir los desechos de baterías inutilizables al finalizar su ciclo de vida y garantizar nuevas baterías con una segunda oportunidad de vida.
¿Qué establece la normativa?
Su regla principal en la creación e innovación de las baterías es la declaración obligatoria sobre la huella de carbono, dentro de lo que se incluye información del fabricante, junto con el modelo de batería y la ubicación geográfica de la planta de fabricación. La información de la huella de carbono a lo largo de la vida útil de la batería, será otro aspecto obligatorio, en especial para aquellas de 20kWh o mayor capacidad.
Documento de identificación
Para definir una mejora en los objetos de reciclaje, el parlamento europeo aprobó la asignación de pasaportes para baterías. De esta forma se piensa mejorar la condición de reciclaje mediante un control de cada batería y eficiencia en la recuperación de materiales. El objetivo es que en los próximos años la industria de reciclado en la UE sea más sólida.
Cabe destacar que, el pasaporte de baterías no solo mejorará su ciclo de reciclaje, también podrá ofrecer información de ubicación y localización, todo mediante una herramienta digital que promueva el valor de las baterías y la regulación de sus estándares establecidos.
Tiempo de vida útil
Otro de los aspectos que incrementa la nueva normativa es el establecimiento de parámetros con respecto a la durabilidad y rendimiento de la batería. Básicamente, se establecerá un rendimiento mínimo electroquímico y su durabilidad. Cada compañía creadora de baterías deberá utilizar las especificaciones técnicas que la comisión estableció para llegar a los valores exactos. De igual forma, tendrán una política de diligencia para un control preciso de los operadores.
Especificación de materiales
Las nuevas baterías creadas deberán incorporar los siguientes materiales en específico: litio, cobalto, plomo y níquel. Si hay ausencia de alguno la normativa lo desaprobará ya que no cumplirá con los objetivos establecidos por el parlamento.
¿Cuándo entra en vigor la nueva normativa?
La normativa fue anunciada y aprobada el mes de agosto con más de 500 votos a favor. Sin embargo, obtuvo 20 abstenciones y 9 votos en contra, por lo que se espera que entre en vigor a partir del año 2024, obteniendo resultados mínimos en el 2027.
Para concluir, se debe tener en cuenta que esta normativa ha sido creada con el fin de mejorar el cambio climático y todos los aspectos negativos que se han presentado en el ambiente a través de la contaminación. Para nadie es un secreto que las baterías hasta la actualidad son parte de ese grupo de desechos inútiles del medio ambiente, los cuales no se pueden reciclar y solo perjudican la calidad de vida de los seres vivos. Por ello, la unión europea espera que las grandes empresas y países que la conforman contribuyan con la nueva normativa para que en los siguientes años sea solidifiquen los cambios para una mejora ambiental.