Los vehículos eléctricos son, sin lugar a dudas, los más eficientes en comparación con otros tipos de motorizaciones, como las de combustibles fósiles, sintéticos, biocombustibles o hidrógeno. La razón principal de su menor consumo radica en su eficiencia, que es insuperable. Es decir, la energía que se utiliza para mover el vehículo se aprovecha al menos el doble en comparación con un motor de combustión interna. Además, la electricidad es una forma de energía relativamente barata, lo que significa que el potencial de ahorro económico es significativo, especialmente a largo plazo, si se consideran los costos de mantenimiento y reparaciones.
Como se ha demostrado recientemente, no todos los vehículos eléctricos consumen lo que se indica en las homologaciones. Si se busca una lista de los consumos mínimos absolutos, se deben buscar en vehículos urbanos, pequeños y ligeros, como el Peugeot i0n, el Citroën Saxo Electrique, el Hyundai IONIQ, el Mitsubishi i-MiEV, el Volkswagen e-Up!, el Citroën C-Zero, el Volkswagen e-Golf, el Renault Twingo E-Tech y el Skoda Citigo EV.
Estos vehículos aparecen en el ranking de Spritmonitor.de y su consumo varía entre 13,2 y 15,2 kWh/100 km, según mediciones realizadas por usuarios en su uso diario durante varios años. Aunque esta información es muy fiable, puede que no resulte muy útil.
Sin embargo, los datos de homologación son útiles para hacer comparaciones, especialmente si se busca una lista de vehículos eléctricos nuevos y disponibles en el mercado que tengan los valores de homologación más bajos, lo que significa que consumen menos energía. A diferencia de los vehículos de gasolina o diésel, la eficiencia de los motores eléctricos no ha variado tanto en términos prácticos.
Fiat 500e
Cuenta con el menor consumo de energía según su homologación, con un mínimo de 13 kWh/100 km. Su motorización de 95 CV consume menos que la de 118 CV, lo que se debe en parte al bajo peso del vehículo en comparación con otros vehículos eléctricos. El Fiat 500e es una excelente opción para conducir en las ciudades, ya que no produce emisiones, es fácil de aparcar y cuenta con tecnología y equipamiento de alta gama.
Dacia Spring Electric
Es el vehículo eléctrico más nuevo del Grupo Renault y su consumo de energía es bajo, con un promedio de 13,9 kWh/100 km. Este modelo cuenta con una motorización de 45 CV y un peso cercano a una tonelada, lo que contribuye a su eficiencia. El Dacia Spring Electric es una buena opción para conducir en la ciudad y cuenta con un precio asequible.
Hyundai Kona Eléctrico
Cuenta con un consumo de energía de 14,3 kWh/100 km, lo que se debe en parte al motor eficiente de 136 CV y al diseño aerodinámico del vehículo. Aunque no es un vehículo pequeño ni ligero, cuenta con un precio razonable y es un modelo completo y equilibrado.
Hyundai IONIQ 6
Cuenta con una de las eficiencias energéticas más bajas en el mercado, con un consumo de 14,3 kWh/100 km. El diseño aerodinámico del vehículo es uno de los factores que contribuyen a su eficiencia. El IONIQ 6 es una buena alternativa a las berlinas alemanas y al IONIQ 5.
Tesla Model 3 de tracción trasera
Tiene una eficiencia energética de 14,4 kWh/100 km, lo que lo convierte en uno de los vehículos eléctricos más eficientes del mercado, especialmente en relación con su potencia. El modelo de propulsión trasera es más asequible que el IONIQ 6 y cuenta con una mayor potencia. Sin embargo, su diseño interior es más sencillo en comparación con otros modelos de vehículos eléctricos.
Es importante tener en cuenta que aunque los datos de homologación son útiles para hacer comparaciones entre vehículos eléctricos, pueden no reflejar el consumo real en condiciones de uso cotidiano. Además, el consumo de energía de un vehículo eléctrico puede variar dependiendo del estilo de conducción, la temperatura ambiental, el uso del aire acondicionado y otros factores.
En cualquier caso, todos los vehículos eléctricos mencionados en esta lista cuentan con un consumo de energía bajo y son buenas opciones para aquellos que buscan una alternativa eficiente y sostenible a los vehículos de combustión interna. Los vehículos eléctricos ofrecen muchas ventajas, como una menor emisión de gases de efecto invernadero, una menor dependencia de los combustibles fósiles y un menor costo de operación a largo plazo.